La ecuación es fácil: para que mantener un boleto “más barato”, los argentinos -a través del Estado- le otorgan a las empresas de transporte un subsidio diario superior a los $17 millones. En total, la secretaría que encabeza Ricardo Jaime tendrá en el año $6260 millones destinados a los transportistas, incluidos los camioneros.
El presidente Kirchner decretó el último viernes un aumentó en el gasto público de $14.219 millones, de los cuales $1795 millones para hacer la política de transporte. Esa suma se sumó a los $1887 millones que ya tenía asignado, de los que ya se había consumido el 93%, según datos de la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP) publicados hoy por el diario La Nación.
Las empresas de trenes, camiones o colectivos, tienen además otra caja que proviene del 20% de cada litro de gasoil que se vende en el país.
Puntualmente, para que las compañías de micros no concreten el aumento del 15 por ciento en los boletos, como vienen amenazando, se le destinaron al Fondo Fiduciario de Infraestructura de Transporte 603 millones de pesos.
Según La Nación, los montos que se destinan a subsidios del transporte equivalen a diez gastos anuales de la Jefatura de Gabinete o casi seis presupuestos de Cancillería para atener las embajadas que se reparten por el mundo.
Diario: Minuto Uno
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